Durante la historia, se cree que han sido muchos los episodios en los cuales los fenómenos solares han golpeado con fuerza a la Tierra. El más reconocido, conocido como el evento Carrington, fue una tormenta solar en la cual desde que se produjo la fuertísima fulguración (se cree que fue superior a X20) hasta que la CME que eyectó llegó a la Tierra, tan solo pasaron unas 16 horas. Lo cual produjo la peor tormenta geomagnética y tormenta solar registrada.
Pero la historia recoge más todavía.
Los libros de historia recogen que durante los años 774 y 775 Carlomagno celebraba su victoria sobre los lombardos tras el asedio de Pavía. Pero en esos años sucedió algo más, algo con un poder también devastador y que llegó del mismo cielo.
Hace unos años un grupo de científicos descubrió un fuerte aumento de depósitos de carbono 14 en bastantes anillos de los troncos de unos cuantos cedros.
Marca de un árbol por exceso de Carbono 14.
Los rayos cósmicos, cuando alcanzan la alta atmósfera de la Tierra, impactan con partículas de nuestro planeta provocando una desintegración en partículas subatómicas. Esta lluvia de partículas que se produce <>, hace que se formen nuevos componentes, como es el carbono con el isotopo radiactivo, es decir el carbono 14.
Los arboles absorben el carbono, pero desconocen como es lógico, si el carbono que están consumiendo es bueno o es radiactivo. Es por ello, que cuando consumen el carbono 14, una huella queda marcada en los anillos del interior de sus troncos.
¿Qué pudo suceder en esa época? ¿Que hizo incrementar los rayos cósmicos para que se produjera tanto carbono 14?
Al principio, se temía que fuera la explosión de una supernova o un estallido de rayos gamma producido en nuestra propia galaxia, pero después de una buena investigación, se determinó que quizás el problema estuvo más cerca de lo que nos esperábamos….
Después de varios estudios se concluyó que el culpable pudo ser una tormenta solar y que está tendría que haber sido de una intensidad de entre unas 10 a 20 veces más grande que el famoso evento Carrington. Siendo así sería la tormenta solar más grande de los últimos 1.300 años.
Para que este evento hubiera sido producido por una potente supernova, está debería haberse producido a una distancia de tan solo 100 años luz, Tal evento habría sido deslumbrantemente brillante en el cielo, mucho más brillante que la Luna llena. Habría permanecido así de brillante durante meses y habría sido observado por todas las civilizaciones de la Tierra. Al estar tan cerca, habría restos de la explosión visibles hoy en día, aún en expansión. Algo tan cercano no podría haber sido pasado por alto.
Un estallido de rayos gamma también se descarta, ya que estos fenómenos solo suceden en un promedio de entre 10 a 15 millones de años. Podría haber sido algo así, pero en tal caso no hay ningún residuo observado en nuestra galaxia.
Lo cual por descarte, nos quedaría la gigantesca tormenta solar.
En caso de que sucediera algo así actualmente (recordemos que aunque este ciclo solar sea muy poco intenso, el Sol es impredecible e imposible de saber cómo reaccionará), se llegaría a producir una enorme desastre a escala global, y más hoy en día donde todo depende de la tecnología y la electricidad.
Uno de los riesgos mas temidos por la meteorología espacial, es un evento solar tan grande que pueda dañar la tecnología, los sistemas eléctricos de larga distancia y las comunicaciones.
Las probabilidades de que suceda un evento de esta tal impresionante magnitud es muy muy baja, pero aun así hay que estar atentos a lo que pudiera suceder.