"La Thakira, es una nave que es en realidad, una enorme ciudad flotante,
cada uno de nosotros hacia un trabajo determinado en ella,
Grandes Dignatarios viajaban con nosotros hasta Sirio y allí se reunirían con Inteligencias Superiores, ya que estaban muy interesados en desarrollar esa nueva raza, producto d
el cruce interestelar.
Confiaban que las razas blanca, negra, amarilla, roja y gigantesca que habían desarrollado tan alta tecnología en Maldeck - Tir se unieran a la raza pasiva y perezosa
que se desarrollaba en Thera, y de aquel cruce surgiera unos seres bronceados impetuosos e inteligentes, al mismo tiempo que respetuosos y pacíficos.
Nuestro equipo, que había sido elegido para descender en Thera, seria tratado con rayos especiales, para adaptarnos y poder vivir en cualquier ambiente,
por más inhóspito que fuera.
Entraríamos en los cuerpos que nos cederían, de un nivel evolutivo muy inferior al nuestro
y no seria como otras veces que descendíamos en cuerpos artificiales creados para tal fin.
Esos cuerpos elegidos entre los que se ofertaron como dadores, deberían tener afinidad,
con las vibraciones más densas de los jardineros que los utilizarían, y ya inmersos en ellos, seríamos tan vulnerables como los terrícolas y sólo nuestras cualidades internas,
nos podrían ayudar en las situaciones adversas que se presentaran.
Nunca antes se había realizado tal experimento, solo se mandaban androides,
o se creaban cuerpos tridimensionales artificiales, que servían como barrera de protección al jardinero que los utilizaba.
Así se recogía
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