domingo, 19 de febrero de 2012

Una pequeña historia... Real muy real.

Esta pequeña historia tiene como protagonistas a dos ejemplares del reino animal, con personalidades bien definidas...y desde que habitan sobre este suelo las han desarrollado e incrementado...
Ellos son un Gato y una Laucha...

Como ha de suponerse las cualidades de ambos son... 
el cazador y la víctima... 

Muchas historias se han narrado sobre tales... pero siempre hay un pero...
esta pequeña historia tiene un argumento muy distinto...

 y vamos a ella...

Ella es "ISIS" 


Una gata siamesa, de profundos ojos celestes, 
mirada penetrante, paso sagaz,
muy...muy malcriada... dueña de todo lugar de la casa
 y primera en requerir beneficios. 

Pero bueno una pegadiza compañía...

Como ven su nombre encierra todo el misterio de los dioses Egipcios
 y si le sumamos 
que su hermano fue Osiris,
 tiene un bagaje de rica historia...

Pero bueno volvamos al aquí, 
tras una mudanza son muchas las cosas que quedan en el garaje 
para ser acomodadas, (por suerte un garaje grande para ellas),
 así en la tranquilidad de la noche, algo irrumpió sobre la misma
 y que salía del garaje...

No era Kin Kong ni un dinosaurio ni la fantasmagórica sombra de un vampiro...

Era una simple y pequeña LAUCHA...


Si... una pequeña y asustada laucha de garaje...

Bueno como quien tiene el As de espada mi sonrisa fue amplia...
 y mis pensamiento fueron concretos...

" Pobre lauchita no sabe con quién se mete...
 aquí está ISIS..."

y mis imágenes mentales fueron estas...


poca vida a la lauchita...

Así que sin levantar la voz y sin gota alguna en la frente reaccioné
 con una simple voz de mando...

" ISIS al ataque..."

y... eso que la vida de ta sorpresa...sorpresa te da la vida...
 se hizo carne propia...

ISIS, descendiente de una casta de grandes cazadores, 
preparada para este primer encuentro con eso que 
representa a los cazados...
y que todos imaginamos su triste final...

Salió como flecha, como escupitajo de músico,
como quien ve a mandinga en noche cerrada... 
como...como...como...

Mis ojos se hicieron grande... 
la respiración se contuvo, un silencio filoso cortó aquel instante...
y ella... sin más movimiento que los esperados... 
surco la pequeña distancia, y de un certero salto
 y felino movimiento logró su cometido...


ESCONDERSE DEBAJO DE LA MESA...

si leyó bien...

ESCONDERSE DEBAJO DE LA MESA...


Infructuosos fueron los diálogos tratando de hacerle entender
 que la naturaleza le había concedido la capacidad de cazar lauchas...
y así era la historia...

Hasta amenazas de por medio, surcaron el espacio...


La comunicación se cortó entre los dos...
 ella debajo de la mesa y yo con mi EGO por el piso...

Mi gata Siamesa... sirve para dos guerras...

 HUYE del combate.

A la mañana siguiente, luego de ver que la situación no había cambiado
 y que tenía que tomar cartas en el asunto...
 fui por una simple y rápida salida... UNA TRAMPERA.

Claro mientras ISIS ponía cara de poker yo vivía un situación muy 

traumática...mis dedos


Que lo parió a la trampera y a ISIS...

Bueno luego de varios intentos y curitas de por medio la trampera quedó lista
y allí fui a colocar tal bajo golpe al cola larga y amante del queso...

y a esperar, atento al clik y al quejido de esa laucha en las fauces de la trampera...

Ahhh, ISIS como quien nada entiende del tema, ya había tomado posesión 
de su lugar habitual en la cama... mi cama...

 A la mañana siguiente ávido de ver el resultado de tan tecnológico plan,
 abrí la puerta hacia el garaje...

con ISIS lejos de la misma,
vió por las dudas que aparezca ese tan aterrador animal... la luchita...

 y allí estaba... como mudo testigo de lo ocurrido en horas oscuras...
 sin más que explicar y sujeto a una realidad cruda y despiadada... 

la Trampera esta sin queso... si leyó bien ...

 sin queso... y armada... 

Es decir que la lauchita se las ingenió para sacar el queso sin activar
 el dispositivo de la trampera...


En silencio y aceptando la triste realidad volví sobre mis pasos, 

miré a ISIS y con un gesto de aceptación casi resignándome 

cerré la puerta del garaje...

La miré a los ojos y haciendo tripas corazón solté aquellas palabras 

que definieron nuestra relación hoy...

"Gatos eran los de antes" 

Bueno... así sigue la cosa... 

Yo... ISIS ... y la Laucha bajo el mismo techo.


Bueno ahora las compras son...





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