miércoles, 25 de julio de 2012

¿POR QUÉ EL CIELO ES AZUL?


La atmósfera actúa como un prisma al descomponer los rayos de luz 
(es decir, las ondas electromagnéticas) que nos llegan del Sol y que tardan 
8,4 minutos aproximadamente.
 Cuando la luz atraviesa la atmósfera los fotones de la radiación colisionen 
con las moléculas de aire, partículas de polvo, gotas de vapor de agua 
(es decir unidades de H2O), y con otros electrones que se encuentran
  en la atmósfera.
Las longitudes de ondas más pequeñas dispersaran más la luz, y como el azul presenta una longitud de onda más corta, ésta es dispersada 10 veces más que la luz roja: la frecuencia de la luz azul está más cerca de la frecuencia de resonancia de los átomos que la luz roja, lo que explica el efecto. 
Este fenómeno se llama dispersión o scattering.
Es por lo que se llama eficacia el motivo por el que no vemos el cielo violeta, sino azul, ya que además que el Sol emite poca cantidad de luz violeta, nosotros la vemos menos: es curioso que los himenópteros, por ejemplo, las abejas, detecten más las longitudes de ondas más cortas, incluso ven el ultravioleta (como se ha comentado en temas anteriores), cierto tipo de girasol tienen un patrón ultravioleta visible a las abejas, donde nosotros vemos un color simple y primario, el amarillo, ellas ven patrones visibles sólo bajo la luz ultravioleta, es decir, captan todo un nuevo espectro cromático.
 Quizá si ellas miraran al cielo lo verían violeta-ultravioleta... 
Al alba y al crepúsculo en el horizonte la luz recorre una mayor distancia y atraviesa una parte más gruesa de la atmósfera, la luz azul ya se ha dispersado por lo que sólo queda la luz blanca menos la azul, es decir, la roja.

¿POR QUÉ EL MAR ES AZUL? 
La creencia de que el mar refleja el cielo, es simplemento eso, 


una falsa creencia. 
Veamos la realidad física.
El mar no funciona de espejo, no refleja el cielo azul, y  su color no se puede explicar por reflexión de la luz de la atmósfera. 
Esto es así porque en un día nuboso, o en el crepúsculo tanto el mar como los lagos continuan siendo azules. Superficies grandes de agua también absorben las ondas electromagnéticas, y de la luz visible es el azul la que más dispersa.