**Cada 19 de diciembre, la Nave Tierra se coloca frente el Centro del Sistema planetario (el Sol) y el Centro del Sistema Galáctico**
La alineación de la Tierra entre Orión y el Sol y con el Centro galáctico
se produce una vez cada año porque la Nave Tierra da vueltas al Sol, pero con
la Luna (Luna nueva) es más significativa, pues se produce cada 19 años,
y aún más si -visto desde la Tierra- la Luna eclipsa al Sol, lo cual no se produce cada 19 años porque depende del grado de inclinación que en ese momento tenga la órbita de la Luna cuando ésta pasa entre la Tierra y el Sol, pues tal órbita oscila y está en relación con otros factores que hacen
más imprecisa la regularidad.
De hecho, tal eclipse volvió a ocurrir 475 años más tarde (año 504)
y luego 437 años después (año 941). El siguiente sí se produjo otra vez
475 años después (año 1416). Y el siguiente en 1919 (503 años después).
Podemos considerar tal momento como el Fin e Inicio del Año de la Tierra (cuando para nosotros es 19 de junio del calendario gregoriano), y como Mitad del Año de la Tierra al momento en que se coloca frente al Sol y el Centro galáctico (cuando para nosotros es 19 de diciembre).
Si a ese momento de Mitad de Año de la Tierra (19 de diciembre) se uniera
la Luna pasando entre la Tierra y el Sol y haciendo un eclipse nos permitiría ver la Vía Láctea en pleno día. Eso también ocurre, pero con menos frecuencia.
Así que si este día 19 de diciembre (o durante una semana antes y después) la Luna eclipsara al Sol al mediodía, veríamos la espléndida franja de la Vía Láctea en pleno día con el Sol (eclipsado por la Luna) y la Luna (eclipsando al Sol) estarían justo encima del Centro de la Galaxia.
Podríamos contemplar la belleza y majestuosidad de esa faja de estrellas y polvo de estrellas que llamamos "Vía Láctea", Árbol cósmico en una de cuyas Ramas (sistema solar) hay una Fruta con mucha agua (un planeta) en la que estamos y desde la que podemos ver el Árbol, aunque no distinguir su Raíz (su centro).
Claro que lo veríamos con "permiso" de las nubes que, si estuvieran sobre la región en la que estamos mientras ocurre ese eclipse tan especial, sería un chasco, pues no ocurre "todas las vidas" (no ya todos los años de una vida ni todos los días de todos los años).
Sí ocurrió, por ejemplo, el 24 de noviembre del año 29 de la era cristiana, pues hace 2000 años el paso del Sol sobre el centro galáctico ocurría hacia el 24 de noviembre. Aquel día del año 29 la Luna se unió a la alineación creando un eclipse, como fue el eclipse en Jerusalen.
Pasó entre la Tierra y el Sol y proyectó su sombra sobre la superficie de la Tierra y la sombra de la Luna pasó por la región de Jerusalén
entre las 12 y las 15 de la tarde.
Quien lo viera con un cielo despejado habría visto la franja de la Vía Láctea.
Esta imagen compartida era la alineación vista desde la cenital