domingo, 1 de septiembre de 2013

El Ununpentium a la Tabla Periódica (30212)

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Luego de haber pasado 10 años desde su descubrimiento y las investigaciones pertinentes, científicos de la Universidad de Lund en Suecia confirmaron la incorporación del ununpentium a la Tabla Periódica. A este nuevo elemento, que aún no tiene nombre confirmado, se le ha designado el nombre de su número atómico en latín.  

El elemento 115

El ununpentium fue descubierto por científicos rusos en Dubna, hace  aproximadamente diez años. Sin embargo, esta semana se confirmó que el elemento 115 pudo ser replicado en el GSI Centro Helmholtz de Investigaciones para Iones Pesados en Alemania.
Hasta que la Unión Internacional de Química Pura y Aplicada (IUPAC, por sus siglas en inglés) decida el nombre oficial que deberá tener el ununpentio, este nuevo elemento  de número atómico 115 pasará a formar parte de la Tabla Periódica de los Elementos, justo entre sus vecinos el Flerovium y el Livermorium, con números atómicos 114 y 116 respectivamente. 
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Si bien este elemento fue inventado hace diez años, el hecho de que hasta ahora sea incluido en la Tabla se debe a que es necesario que sea verificado por dos laboratorios diferentes para que la IUPAC pueda considerarlo como un elemento nuevo. De esta manera, la incorporación es oficial.

Pruebas para obtener el Ununpentium

El número atómico de los elementos tiene que ver con su peso, es decir, el número de protones que tiene dicho átomo. En la naturaleza, el elemento más pesado es el Uranio, con 92 protones. Todos los elementos que le siguen en peso en la Tabla han sido creados por el ser humano a través de la fusión nuclear.
La fusión nuclear es, en esencia, algo muy simple. 
La manera en la que se crea un nuevo elemento es disparando una descarga de un elemento existente a otro elemento existente esperando el resultado del choque de los mismos. En el caso del 115 se utilizó un elemento inestable y radioactivo llamado Americium, al cuál se le dispararon átomos de Calcio.
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Este proceso duro bastante tiempo pues algunos de los átomos de Calcio rebotaban del Americium. Lo cierto es que algunos más comenzaron a adherirse al mismo.
 El resultado fue un átomo de corta existencia que ahora se conoce como el 115.
La vida de estos átomos es muy corta, probablemente inferior a un segundo
. La manera de detectar su existencia es midiendo sus emisiones de partículas Alfa.
 Cuando estas emisiones son recurrentes se puede tener la certidumbre de haber fabricado un nuevo elemento.
Si bien el proceso es simple, no cualquiera podría realizarlo.
Para crear una colisión a nivel del átomo es necesaria una enorme cámara de vacío.
 Además el equipo es altamente especializado para detectar el átomo al cual se hará el disparo y los propios disparos, pues deben ser certeros. 
Son muy pocos los laboratorios con estas características.
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