The Scale of the Universe 2, un interactivo similar que hace tiempo estuvo circulando por la Red de Internet.
Basta mover la barra de desplazamiento o usar la rueda del ratón, y también se puede hacer clic sobre los objetos.
Un viaje desde lo muy grande hasta lo muy pequeño que nos enseña cómo es el Universo al que pertenecemos y las distancias de las escalas de los objetos que lo pueblan.
Aquí podemos contemplar como se está formando una Nebulosa planetaria al final de la vida de una estrella. El Sol que es una estrella mediana de la clase G2V, amarilla y muy corriente en el Universo, pasará por esta misma fase cuando se acerque el momento de consumir todo su combustible nuclear de fusión y se convierta en una gigante roja.
Expandirá plasma creando una nebulosa de emisión que consiste en una envoltura brillante de gas ionizado que desde su centro, la masa de la estrella se irá contrayendo más y más hasta convertirse en una enana blanca.
Los telescopios espaciales Hubble y Spitzer, descubrieron la que es hasta el momento la galaxia más lejana que podemos observar en nuestro universo, localizada a 13.300.000 años luz de nuestro Sistema solar.
La luz que emite la MACS0647-JD viajó 13.3 mil millones de años antes de alcanzar nuestro entorno planetario.
La imagen nos transmite la sensación de que la imagen es el resultado final de la fusión de dos galaxias más pequeñas que se ha convertido en una mayor.
Cúmulo Globular M-54. Estimaciones modernas sitúan a M54 a una distancia de unos 87.000 años luz, lo que se traduce en un diámetro verdadero de 300 años luz. Es uno de los cúmulos globulares más densos, siendo de clase III
(I es la más densa y XII la menos densa).
Su luminosidad es aproximadamente 850.000 veces la del Sol.
El cúmulo no es de la Vía Láctea sino que está situado en la galaxia Enana Elíptica de Sagitario (SagDEG), por lo que se considera el primer cúmulo extragaláctico descubierto.
El Hubble ha captado el transitar de estrellas fugitivas que se abren paso a través de regiones nebulosas de densas estructuras de gas y polvo interestelar que es ionizado a su paso con la radiación del plasma estelar y van dejando una hebilla resplandeciente.
Este tipo de estrellas se mueven por el espacio a velocidades atípicamente altas, muy diferentes al de las estrellas de su entorno y llegan a ser supersónicas en relación al medio interestelar.
Una imagen de nuestro centro galáctico, es decir, el centro de rotación de la Vía Láctea. Allí existen ingentes masas de material y estrellas viejas.
Está situado a menos de 8 kiloparsec de nuestro Sistema solar en dirección a la Constelación de Sagitario, allí donde nuestra Galaxia aparece más brillante y, en aquella región en la que está Localizada la radiofuente Sagitario A, el Agujero Negro supermasivo central de la Galaxia.
Aquí, desde una distancia más cercana podemos contemplar la imagen tomada por el Observatorio europeo de rayos X denominado XMM que nos deja contemplar el misterioso conglomerado de materia que está presente en el centro de la Vía Láctea.
La emisión de rayos X es inmensa y se genera, según se cree, cuando la materia es sometida a temperaturas de millones de grados al ser atraída y engullida por el garganta estelar, o Agujero Negro gigante que allí habita y que en los procesos que la inmensa fuerza de Gravedad que se produce, crea violentos fenómenos energéticos que son captados por nuestros ingenios tecnológicos desde la Tierra.
No importa hacia donde podamos dirigir nuestras máquinas para captar señales, imágenes o sonidos del Universo más o menos lejano.
Siempre encontraremos las mismas cosas: Galaxias conformadas por estrellas y bellos objetos de exótica belleza, sistemas solares de múltiples mundos en los que podrán existir o no criaturas vivas que, como nosotros, sean conscientes de formar parte de algo tan grande que…
¡No llegan a comprender! Sin embargo, seguramente “ellos”, como nosotros, estarán tratando de saber.

Nuestro universo es igual en todas partes.
Las leyes que rigen en todo el Universo son las mismas.
La materia que puebla el Universo, gases estelares, polvo cósmico, galaxias con cientos de miles de millones de estrellas y sistemas planetarios, todo se va repitiendo en cualquier confín del Universo.
Todo el Universo, por lo tanto, está plagado de de galaxias que en sus núcleo centrales albergan Agujeros Negros
. Cientos de miles de millones de estrellas de todo tipo: neutrones, púlsares y magnétares, enanas blancas y rojas, estrellas gigantes…
En realidad, con el transcurso del tiempo, el número de estos objetos exóticos masivos irán en aumento, ya que, cada vez que explota una estrella supermasiva, nace un nuevo agujero negro o una estrella de neutrones, transformándose así en un objeto distinto del que fue en su origen.
De gas y polvo pasó a ser estrella y después se transformó en un Agujero negro o en una estrella de neutrones.
Hemos llegado a saber dónde nos encontramos, le hemos puesto nombre a la galaxia que acoge nuestro mundo situado dentro de un pequeño Sistema solar en el que, según todos los indicios, sólo nosotros hemos podido alcanzar la consciencia de Ser.
Llevamos aquí como “seres verdaderos” unos cien mil años y, aunque hemos podido alcanzar muchos logros a medida que nuestro cerebro ha ido evolucionando y hemos aprendido del entorno, de la Naturaleza, todavía nos queda mucho camino por recorrer y seguimos confinados en este pequeño y maravilloso planeta que llamamos Tierra, desde el que, utilizando el ingenio y la imaginación, hemos podido saber de nuestro entorno más cercano y también, del más lejano.
Nube molecular gigante conocida como NGC 7635 La Nebulosa Burbuja.
Es una nube masiva de gas y polvo interestelar compuesta fundamentalmente por moléculas.
Tienen un diámetro típico de unos 100 años-luz y las masas varían unos pocos cientos de miles de hasta diez millones de masas solares.
Las NMGs (Nubes Moleculares Gigantes) consisten mayoritariamente en moléculas de hidrógeno (H2, 73% en masa), átomos de Helio (He, 25%), partículas de polvo (1%), Hidrógeno atómico neutro ( H I, del 1%) y un rico cóctel de moléculas interestelares (menos del 0,1%).
Nuestra Galaxia contiene más de 3000 NMGs, estando las más masivas situadas cerca de la radiofuente Sagitario B2 en el Centro Galáctico.
Nuestra Galaxia tiene tres componentes principales. Uno es el disco de rotación de unas 6×1010 MO (masas solares) consistentes en estrellas relativamente jóvenes (Población II), cúmulos cubiertos de gas y polvo, estando estrellas jóvenes y material interestelar concentrados en brazos espirales.
El disco es muy delgado, de unos 1.000 a. l., comparado con su diámetro de más de 100.000 años-luz.
Aún continúa una activa formación de estrellas en el disco, particularmente en las nubes moleculares gigantes.
El segundo componente principal es un halo débil y aproximadamente esférico con quizás el 15-30% de la masa del disco.
El halo está constituido por estrellas viejas (Población II), estando concentradas parte de ellas en cúmulos globulares, además de pequeñas cantidades de Gas caliente, y se une a un notable bulbo central de estrellas, también de la población II.
El tercer componente principal es un halo no detectado de materia oscura con una masa total de al menos 4×1011 masas solares.
En total, hay probablemente alrededor de 2×1011 estrellas en la Galaxia (unos 200 mil millones), la mayoría con masas menores que el Sol.
La edad de la Galaxia es incierta, si bien el disco tiene al menos
10.000 millones de años, mientras que los cúmulos globulares y la mayoría de las estrellas del halo se cree que tienen entre 12000 y 14000 millones de años.
Lo cierto es que nuestro entorno es una ínfima porción del Universo conocido.
La Vía Láctea es una espiral, aunque las observaciones de su estructura y los intentos de medir las dimensiones de los brazos espirales se ven impedidos por el polvo oscurecedor del disco y por las dificultades en estimar distancias.
Es posible que la Galaxia sea una espiral barrada dado que existen algunas evidencias de una estructura en forma de barra en las regiones centrales.
Todas las galaxias son sistemas de estrellas, a menudo con gas y polvo interestelar, unidas por la gravedad. Las galaxias son las principales estructuras visibles del Universo.
Varían desde las enanas con menos de un millón de estrellas a las supergigantes con más de un billón de estrellas, y un diámetro desde unos pocos cientos a mas de 600.000 años-luz.
Las galaxias pueden encontrarse aisladas, o en pequeños grupos, como el nuestro, conocido Grupo Local, o en grandes cúmulos, como el Cúmulo de Virgo.
Las galaxias irregulares tienen una estructura bastante amorfa e irregular, en ocasiones con evidencias de brazos espirales o barras.
Unas pocas galaxias no se parecen a ninguno de estos tipos principales, y pueden ser clasificadas como peculiares.
Muchas de éstas son probablemente los resultados de choques entre galaxias que han quedado fusionadas quedando configuradas después de manera irregular.
El tipo de galaxia más numeroso pueden ser las galaxias esferoidales, pequeñas, y relativamente débiles, que tienen forma aproximadamente elíptica.
Se cree que las Galaxias se han formado por la acumulación gravitacional de gas, algún tiempo después de la época de la recombinación.
Las nubes de gas podrían haber comenzado a formar estrellas, quizás como resultado de las colisiones mutuas.
El tipo de galaxia generado podría depender del ritmo al que el gas era transformado en estrellas, formándose las elípticas cuando el gas se convertía rápidamente en estrellas, y las espirales si la transformación de estrellas era lo suficientemente lento como para permitir crecer de forma significativa un disco de gas.
Las galaxias evolucionan al convertir progresivamente su gas remanente en estrellas, si bien no existe probablemente una evolución entre las diferentes tipos de la clasificación del conocido sistema de Hubble.
No obstante, algunas galaxias elípticas pudieron haberse creado por la colisión y posterior fusión de dos galaxias espirales.
Imagen tomada por la colaboración CLASH del cúmulo de galaxias MACS1206 (z=0.4385), mostrando cincuenta imágenes correspondientes a doce galaxias distintas.
Son muchos los cúmulos y sùper cúmulos de galaxias que están esparcidos por todo el Universo y conforman las grandes estructuras que conocemos.
El número relativo de Galaxias de los diferentes tipos está íntimamente relacionado con su brillo intrínseco y con el tipo de grupo o cúmulo al que pertenecen. En los cúmulos densos, con cientos o miles de galaxias, una alta proporción de las galaxias brillantes son elípticas y lenticulares, con unas pocas espirales (5-10%).
No obstante, la proporción de espirales pudo haber sido mayor en el pasado, habiendo perdido las espirales su gas de manera que ahora se asemejan a los lenticulares, o habiendo sufrido fusiones con otras galaxias espirales e irregulares para convertirse en elípticas. Ya sabéis que nada desaparece, solo se transforma.
Fuera de los cúmulos la mayoría de las galaxias pertenecen a grupos que contienen entre unos pocos y varias docenas de miembros, siendo raras las galaxias aisladas. Las espirales constituyen el 80% de las Galaxias brillantes en estos entornos de baja densidad, con una correspondiente baja proporción de elípticas y lenticulares.
Algunas galaxias presentan una actividad inusual en su centro, como las galaxias Seyfert o las galaxias N.
Una radiogalaxia es un emisor inusualmente intenso de energía en forma de ondas de radio. Hablando de Galaxias podríamos movernos en un amplio abanico de posibilidades de las que relaciono algunas a continuación:
Galaxia head-tail, Galaxia anular, Galaxia binaria, Galaxia compacta, Galaxia con bajo brillo superficial (LSB), Galaxia con envoltura, Galaxia de anillo polar, Galaxia de disco, Galaxia de tipo tardío, Galaxia de tipo temprano…
De cada una de ellas os hablé aquí mismo en otros trabajos y todas tienen una historia de por qué tienen la conformación que las definen.

GRUPO LOCAL DE GALAXIAS
| |
Galaxia
|
Distancia en kpc
|
Andrómeda (M 31) |
725
|
Vía Láctea |
-0
|
Del Triángulo (M 33) |
795
|
Gran Nube de Magallanes |
49
|
IC 10 |
1250
|
M32 (NGC 221) |
725
|
NGC 6822 (de Barnard) |
540
|
M 120 (NGC 205) |
725
|
Pequeña Nube de Magallanes |
58
|
NGC 185 |
620
|
NGC 147 |
660
|
IC 1613 |
765
|
Wolf-Lundmark-Melotte |
940
|
Enana de Fornax |
131
|
Enana de Sagitarius |
25
|
And I |
725
|
And II |
725
|
Leo I |
273
|
Enana de Acuarius (DDO 210 |
800
|
Sagitarius (Sag DiG) |
1.100
|
Enana de Sculptor |
78
|
Enana de Antlia |
1.150
|
And III |
725
|
IGS 3 |
760
|
Enana de Sextans |
79
|
Enana de Phoenix |
390
|
Enana de Tucana |
870
|
Leo II |
215
|
Enana de Ursa Minor |
63
|
Enana de Carina |
87
|
Enana de Draco |
76
|
En el cuadro anterior del Grupo local de Galaxias al que pertenece la Vía Láctea, en la que está nuestro Sistema solar, se consigna las distancias a que se encuentran estas Galaxias de la nuestra y se hace en kiloparsec.
En el espacio exterior, el cosmos, lo que conocemos por Universo, las distancias son tan enormes que se tienen que medir con unidades espaciales como el año-luz (Distancia que recorre l luz en un año a razón de
299.792.458 metros por segundo.
Otra unidad, ya mayor, es el Pársec (pc) Unidad básica de distancia estelar, correspondiente a una paralaje trigonométrica de un segundo de arco (1”).
En otras palabras, es la distancia a la que una Unidad Astronómica
(UA = 150.000.000 Km.)
subtiende un ángulo de un segundo de arco. Un Pársec es igual a
3,2616 años-luz, o 206.265 Unidades Astronómicas, o 30,857×1012 Km.
Para las distancias a escalas Galácticas o intergalácticas, se emplea una Unidad de medida superior al Pársec, el Kiloparsec (kpc) y el megaparsec (Mpc).
Esas inmensas distancias son, de momento, la barrera que nos tiene confinados en nuestro Sistema Solar del que no tenemos ningún medio de salir, y, si en el futuro pudiéramos viajar a las estrellas, no podría ser por los medios convencionales que ahora conocemos, sino que, tendríamos que dominar el hiperespacio para poder llegar a regiones lejanas del Universo en un tiempo razonablemente aceptable y soportable.