Las ondas cerebrales se ajustan a los ritmos de la naturaleza.
Las mismas reglas que gobiernan moléculas cuando se condensan de gas a líquido, o se congelan de líquido a sólido, también se aplican a los patrones de actividad de las neuronas en el cerebro humano
“Las estructuras que se construyen a partir de un gran número de unidades pueden exhibir transiciones bruscas de un estado a otro, lo cual los físicos conocen como transiciones de fase”, “Suceden cosas extrañas e interesantes en la vecindad de una transición de fase”.
Cuando los líquidos pasan por las transiciones de fase, se evaporan en gas o se congelan en hielo. Cuando el cerebro pasa por una transición de fase cambia de una actividad aleatoria a una basada en patrones. “El cerebro en descanso produce actividad aleatoria”, o lo que los físicos conocemos como “movimiento Browniano”.
Aunque el grueso del trabajo implica derivar ecuaciones, las conclusiones matemáticas encajan bien con los datos generados en laboratorio sobre el córtex cerebral y los electroencefalogramas. Los últimos hallazgos demuestran que las mismas herramientas matemáticas que usamos los físicos para describir el comportamiento de las partículas subatómicas y la dinámica de fluidos y sólidos pueden ahora aplicarse para comprender cómo el cerebro genera sus distintos ritmos.
Esto incluye a las ondas delta generadas durante el sueño, las ondas alfa del cerebro visual, y las ondas gamma, descubiertas durante la última década, las cuales parecen estar relacionadas con el procesado de la información. “El estado de reposo del cerebro parece tener una estructura estadística que es característica de un cierto tipo de transición de fase”, “El cerebro quiere colocarse allí debido a que ese es el lugar donde el procesado de la información es óptimo”.
Las mías se ubican en la curiosidad de la propia Creación y se desplazan al ritmo de los espacios y silencios... con un toque de magia y mucho de fe.
Adolfocanals@educ.ar
Las mismas reglas que gobiernan moléculas cuando se condensan de gas a líquido, o se congelan de líquido a sólido, también se aplican a los patrones de actividad de las neuronas en el cerebro humano
“Las estructuras que se construyen a partir de un gran número de unidades pueden exhibir transiciones bruscas de un estado a otro, lo cual los físicos conocen como transiciones de fase”, “Suceden cosas extrañas e interesantes en la vecindad de una transición de fase”.
Cuando los líquidos pasan por las transiciones de fase, se evaporan en gas o se congelan en hielo. Cuando el cerebro pasa por una transición de fase cambia de una actividad aleatoria a una basada en patrones. “El cerebro en descanso produce actividad aleatoria”, o lo que los físicos conocemos como “movimiento Browniano”.
Aunque el grueso del trabajo implica derivar ecuaciones, las conclusiones matemáticas encajan bien con los datos generados en laboratorio sobre el córtex cerebral y los electroencefalogramas. Los últimos hallazgos demuestran que las mismas herramientas matemáticas que usamos los físicos para describir el comportamiento de las partículas subatómicas y la dinámica de fluidos y sólidos pueden ahora aplicarse para comprender cómo el cerebro genera sus distintos ritmos.
Esto incluye a las ondas delta generadas durante el sueño, las ondas alfa del cerebro visual, y las ondas gamma, descubiertas durante la última década, las cuales parecen estar relacionadas con el procesado de la información. “El estado de reposo del cerebro parece tener una estructura estadística que es característica de un cierto tipo de transición de fase”, “El cerebro quiere colocarse allí debido a que ese es el lugar donde el procesado de la información es óptimo”.
Las mías se ubican en la curiosidad de la propia Creación y se desplazan al ritmo de los espacios y silencios... con un toque de magia y mucho de fe.
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