
Los argentinos si de algo sabemos es de inflación, y que las hemos vividos y la vivimos y las viviremos, pero de la crisis del 30 en U.S.A. no había vuelto a oír hablar de este histórico acontecimiento desde mis clases de historia, pero también recordando que las prensas alemanas no daban abasto imprimiendo billetes que al día siguiente no tendrían ningún valor, salvo tal vez el de ladrillos de construcción en los juegos infantiles.
He leído que la gente corría a sacar todo el dinero en cuanto cobraba (para lo cual necesitaban hasta carretillas) y lo gastaban en seguida en alimentos, antes de que pasasen a servir únicamente como papel higiénico (en Weimar uno podía literalmente limpiarse el trasero con billetes de decenas o cientos de millones de marcos).
He leído que cuando el papel también escaseó, usaron los billetes anteriores y reimprimieron directamente sobre ellos otros con mayor valor (en la imagen inferior un billete de 500 millones de marcos reutilizado para sobreimprimir uno de 20 millones, o sea 40 veces mayor).
Hoy en día, muchos de los argentinos o estadounidenses con apellido alemán son descendientes de los emigrantes germanos de entreguerras que lograron huir de su país como pudieron.
Aquella surrealista situación y el desencanto en la población que producía – recordemos que una de las causas principales de aquella sangría fueron las desmedidas compensaciones económicas que impusieron los vencedores de la Primera Guerra Mundial -
En esta realista situación ... cuál sería la causa ... muchas respuestas verdad...
ahhh todas bonitas ... y repetidas.
En fin,
que tras leer que en 1923 la inflación subió
en Alemania un 1.000.000.000.000%,
de pronto nuestra inflación actual
(en torno al ??? % anual)
me parece menos preocupante.
(parece propaganda oficial ... ¡¡¡no!!!)
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