Cuando mis ojos te quiten la ropa
y la oración se quede tatuada en tu cuerpo
el carmín de los no.me.olvides
inundará el respirar.
Cuando tus labios se quemen en los míos
con esas ganas de jugar a nada
no habrá fronteras
ni tiempo para prevenir.
Cuando nos devoremos
pequeña mía
estallarán los relojes
así que olvídate de las horas, minutos y segundos.
