El camino ha sido largo y al recorrerlo hemos podido vivir unos momentos más felices que otros, todo eso queda atrás, en lo que llamamos pasado.
Ahora, nuestra imaginación que inventó la manera de escenificar el Tiempo inventando el reloj y el calendario, hace que estemos en esa sensación ilusoria de que algo termina hoy para algo comience mañana.
En realidad nada cambia y todo sigue transcurriendo de la misma manera que lo hizo ayer y lo seguirá haciendo mañana.
Somos prisioneros de una abstracción que llamamos Tiempo.

De todas las maneras y, como en eso estamos, les deseo a todos lo mejor y, más que fortuna, Salud y Trabajo para todos y que en los momentos de ocio, podamos seguir aquí, conociendo cosas del Universo, de la Física, del Pasado que nos enseña cómo fue la Humanidad y sus obras, de los pensamientos de todos los grandes sabios que nos han precedido y de los que tenemos que aprender.
Desde aquí he procurado estar con todos ustedes día tras día para contarles cómo somos, especular sobre nuestro origen y nuestro posible destino, comentar sobre lo que creemos que el Universo es, las fuerzas que están presentes y cómo funciona la Naturaleza.
La Física y la Astronomía han sido nuestras compañeras y hemos tratado de profundizar en los secretos que otros más sabios que nosotros pudieron desvelar.

He repetido una y mil veces lo mucho que nos queda por saber, y la inmensa ignorancia que cargamos sobre nuestros débiles hombros.
También hemos comentado sobre lo efímero de nuestra estancia en éste mundo maravilloso y de lo mucho que nos queda por evolucionar, estamos en el proceso de humanización que está muy crudo aún, sólo con mirar las noticias del mundo y los comportamientos que lucimos…
¡Es suficiente para saberlo!
Espéremos que en el nuevo tramo que comienza podamos ser mejores.
Hemos podido llegar a saber que la vida está estrechamente ligada a las estrellas y a “los mundos” y, aunque solo tengamos una muestra de ella que se ha dado en el planeta que llamamos Tierra…
Todos los indicios apuntan a que muchos otros mundos también, como el nuestro, podrá albergar la vida ¡de tantas formas diferentes!
“En Cosmología, las “iniciales” raramente son absolutamente iniciales, pues nadie sabe como calcular el estado de la materia y el espacio-tiempo antes del Tiempo de Planck, que culminó alrededor de 10-43 de segundo Después del Comienzo del Tiempo.”

“La idea de que la vida en el Universo sólo existe en la Tierra es básicamente precopernicana. La experiencia nos ha enseñado de forma repetida que este de pensamiento es probablemente erróneo. ¿Por qué nuestro pequeñísimo asentamiento debe ser único? Al igual que ningún país ha sido el centro de la Tierra, tampoco la Tierra es el centro del Universo.”

La química de la vida estar presente en cualquiera de esos pequeños mundos que nos rodean y, conforme a los estudios realizados y los que continúan en marcha actualmente, en cualquier momento dentro de este mismo siglo en el que nos ha tocado vivir, se podría dar la noticia sorprendente de que han detectado ¡al fin!, formas de vida extraterrestres.
Lo cierto es que, los humanos seguimos afianzándonos a todo lo que nos ponga en el centro de las cosas.
Los fenómenos que no pueden ser explicados nos excitan y hemos usándolos justificar a nuestros dioses que descubrimos que podemos producir ilusiones para tapar nuestra ignorancia.
Cada vez que algo es explicado, movemos nuestras pertenencias hacia el próximo misterio; y cuando ese enigma revela sus mecanismos nos pasamos a otro.
No es la ausencia de evidencia lo que mortifica al creyente que propone afirmaciones extraordinarias como verdaderas, son las evidencias del otro, del científico en el laboratorio; él lo obliga a buscar otra casa y mudarse donde no haya iluminación.
Lo cierto es que, creamos nuestra propia realidad dentro de otra realidad más grande que resulta ser el UNIVERSO.

Claro que la poca sabiduría que hemos podido adquirir con las vivencias, la observación, el experimento y las teorías creadas por profundos pensamientos, esa “sabiduría” a la que tantas veces me he podido referir aquí, nos debería llevar hasta propósitos superiores, incluso de una célula podríamos aprender :
Cada célula del cuerpo acuerda trabajar por el bien del Todo; el Bienestar individual es secundario. Si es preciso, morirá para proteger al cuerpo.
La vida de cualquier célula es muchísimo más breve que la nuestra.
Las células de la piel mueren por cientos cada hora, al igual que las inmunológicas que combaten a los microbios invasores.
El egoísmo resulta inconcebible, incluso cuando la supervivencia de las células está en juego.
¿Por qué no hacemos nosotros lo mismo en relación a todos los demás?
¿Cuando nos daremos cuenta de que todos somos uno.
Algunas veces, mirando la historia evolutiva de la vida, uno tiende a pensar que, de todas las estructuras complejas producidas por la biología terrestre (es lo único que conocemos), ninguna es más importante que el cerebro humano, el más complejo de todos los órganos.
Lo que nos lleva a plantearnos una pegunta:
¿Son los cerebros sólo accidentes aleatorios de la evolución, o son los inevitables productos derivados de un proceso de complejificación que sigue unas leyes?

Hablamos del cerebro humano por ser el “desconocido” mejor conocido, muchas son las inteligencias que están presentes en nuestro planeta y que, no hemos podido llegar a conocer.
De algunos animales, podemos haber vislumbrado alguna clase de inteligencia y, si me apuran, hasta de sentimientos pero, lo que se dice conocer lo que se puede fraguar en sus cerebros…, es una gran incógnita nosotros que, somos los seres predominantes en el planeta y, además de ser conscientes hemos llegado a presentir que tenemos“Alma”, algo tan complejo que, siendo portadora de los sentimientos y los pensamientos, es, sin embargo, inmaterial y etérea.
Eso que llamamos Alma es en realidad la “sabiduría”, la que nos llevará a comprender, algún día, lejos aún en el futuro, lo que somos y para qué estamos aquí.
Todo se fragua en lugares que, como el que arriba podemos contemplar, se producen millones de conexiones e impulsos eléctricos que llevan las al centro de información del cerebro de dónde surge la conciencia y emerge el Yo particular de cada uno de nosotros que, de esa manera, al recibir la información que le envía los sentidos, llega a ser consciente de Ser.
Esperemos que en el próximo año podamos ser conscientes de que, nuestros comportamientos dejan mucho que desear, que seamos mejores con los demás y, sobre todo, que sigamos tratando de mejorar en todos los sentidos, dado que, de otra manera… ¡mal futuro nos espera!
Felicidades a todos.