domingo, 18 de octubre de 2015

Monje budista medita en una sartén con aceite presuntamente caliente

pelotillas refritas

Este es uno de esos vídeos que impactan al verlos.
 Un monje budista medita en un recipiente lleno de aceite colocado al fuego, sin mostrar dolor ni quemaduras aparentes.
¿Se debe esto a algún tipo de alteración corpórea a la que se llega a través de un estado alterado de conciencia?
A veces me asusto yo mismo con las cosas que escribo.
 Evidentemente esto no es magia. 
El vídeo que circula por las redes sociales muestra solo el momento en el que el monje medita, y solo por unos segundos.


Ahora busquemos la explicación física de tal mentira...

El fondo del cuenco se llena con lo que parecen unas semillas vegetales, o arena, y grandes hojas.
 Después de ello, se vierte el contenido de unas garrafas opacas en el recipiente metálico, y se le prende fuego por debajo.
 Por la posición del monje en el aceite, la profundidad de la capa de aislamiento debe de ser de más de 40 cm.
Bueno, pensarán. A pesar de eso el aceite tiene que estar en contacto con el metal, se calentará y hervirá, churruscándole las pelotitas al monje.
Aquí tenemos que observar dos cosas. 
Primero que el recipiente parece tener dos capas, existiendo una separación entre la chapa que está en contacto con el fuego y la que está en contacto con el líquido. 
Si ese hueco estuviese al vació, el calor no le llegaría al monje. 
Con una solución más rústica, si se pone en esa capa intermedia un mal conductor del calor, como la arena, eso le daría unos minutos de “tranquilidad” al monje, en los que tendría a salvo sus gónadas.
Pero si el líquido que está en las garrafas, es aceite mezclado con agua, habiendo calculado muy bien la cantidad de agua vertida para que nunca llegue a estar en contacto con el monje, ocurriría un fenómeno muy curioso.
 El agua se iría al fondo y absorbería todo el calor, dejando el aceite con una temperatura soportable. 
En el siguiente vídeo, el profesor Jessada Denduangboripant, de la universidad de Chulalongkorn, reproduce este experimento en un laboratorio.
 Podemos ver cómo meten la mano en aceite, que permanece frío, mientras que el agua de la capa inferior hierve.