martes, 1 de marzo de 2016

A vos... que estás allí...


Aparecés de golpe, como siempre.
Me rodeás, vas y venís
¡y atormentás a mis oídos!.
Llegás con la única intención
de molestarme abiertamente.
No importa en cuál estación
ni circunstancia.
Estás ahí, constante. Lleno de mí.
Te odio cuando hacés eso
Te detesto. Y cuando te busco
Sabés como enconderte,
y te escondés nomás, te burlás de mí.
Pero yo sé que me necesitás, idiota.
(Yo sé que me necesitás idiota).
En el preciso instante,
donde vuelva a verte
donde vuelvas a rodearme
te voy a derribar de una buena vez…
mosquito hijo de puta.

No hay comentarios: