A través de Mi cuerpo y conciencia pasan las energías utilizadas por la humanidad, y a través de Mi conciencia también pasa la vida de los Chohanes. Por experiencia, conocemos la belleza y el amor dentro de cada uno de los electrones que fluye desde su Presencia a sus corazones.
Sabemos que dentro de cada electrón está el Poder de Dios en persona. Estamos en constante reverencia ante el Don de la Vida, y es Mi responsabilidad velar porque la vida de los Chohanes sea invertida sabia y sensatamente. Yo soy Su Padre en el sentido espiritual de la palabra, y sé que si Ellos toman Su esencia de vida y se la dan a ustedes, deberán Ellos comparecer ante los Señores del Karma y probar que ustedes han prestado un buen servicio con esa Vida; dicho de otra manera, que Su inversión se ha hecho sensatamente.
Si el mundo y la evolución de la que ustedes son miembros no se hubiera beneficiado por la presencia y servicio de los Chohanes,
por Su asesoría, por su interés específico y detallado en ustedes; si por cuenta del Amor y la Misericordia, Ellos hubieran invertido en ustedes las energías de Sus vidas y Su tiempo, y ustedes no dieran señales de progreso espiritual individual ni prestaran en retorno un servicio impersonal a la Vida, Ellos tendrían que reponer esa energía investida en ustedes mediante algún Servicio Cósmico. Luego, debido a Mi Amor por ustedes, no Me gustaría que sobre sus hombros recayera el karma desagradable debido al letargo y omisión de servicio, no sea que la mencionada visitación.
Amor y Misericordia fueran tomados meramente como una diversión para sus conciencias, en vez de como un estímulo para servir en Nuestra causa.
Por tanto, al tiempo que cada uno de ustedes comparecía ante
Mí con su respectivo Padrino, Yo examiné su posible servicio a la vida y, antes de conferirle al Chohán el privilegio de llegar a ustedes,
Me aseguré dentro de Mí que ustedes amaban la vida y que si el Chohán les daba Su energía, la asociación sería beneficiosa tanto para Mis Hijos cuanto para ustedes. Oré al Dios de Toda Vida que una conexión más íntima entre Gurú y chela resultara en un patrón brillante de Luz y Servicio, el cual el Chohán pudiera presentar a los Señores del Karma en nombre de ustedes.