jueves, 19 de septiembre de 2013

aquellos Pulsos...



Entre la luz y la oscuridad, solo el parpadeo.
Atracción y rechazo. Acción y reacción. Masa y vacío.
 Pulsos que nacen de la duda, ¿o es de la necesidad?

En la pugna por imponerse, ¿no subyace la urgencia de crecer sobre sí mismos? 
Juego de cesiones y concesiones de imprevisto final.
En la medida que se aleja la oscuridad, ¿es la luz lo que se advierte al fondo o el reflejo de la masa sobre el vacío?

Los aprendices de demiurgo pugnan por taponar cualquier resquicio a través del cual la luz se manifieste.
 ¿Se avecina un retorno a las tinieblas?

Si se pudiera mantener el equilibrio. Si fuera posible contener el asalto.
Si la luz se apartara a su vez del vacío.

Apenas es el inicio de los tanteos.
 Voces que se expanden por espacios que pueden alcanzar turbulencias. 

Personalidades fuertes y caracteres pusilánimes se pondrán a prueba. 
Un eco que se creía lejano rebota y se aproxima. 

Una garganta invisible pregunta: y tú, ¿dónde estás?