Quien diga que la vida es fácil miente como un asno . Hay historias que comienzan siendo un cuento de hadas, que transcurren como una comedia romántica y que terminan siendo un poema. Es entonces cuando se nos pone cara de tontos y afloran unos sentimientos que nos desbarajustan por dentro y que parece que vayan a convertirse en nuestros perennes inquilinos. Nos vemos perdidos y tenemos miedo a no recuperar ya nunca, no ya la alegría hasta entonces vivida, sino incluso la serenidad.
La tormenta ha descargado y ahora está lloviendo. El agua, amenazadora, se estampa contra los cristales y los golpea. Pero al mismo tiempo los está limpiando. Y cuando te quieras dar cuenta podrás ver y escuchar a través de ellos un suave chirimiri que te invitará a abrir de nuevo tu ventana. Desearás abrirla, y lo harás. Y dejándote llevar, bajarás de nuevo al jardín, y te tumbarás junto a tus árboles preferidos a, sencillamente, respirar de nuevo.
Salomón era muy sabio y me hubiera dado sopas con hongos, pero yo sé de muy buena tinta que al menos en una cosa se coló, y es que siempre hay algo nuevo bajo el sol.
adolfocanals@educ.ar
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