Son la capacidad de pensar sin cabeza, volar sin alas, caminar sin pies, observar sin perturbar, escuchar sin interrumpir, palpar sin crear incomodidad, disfrutar de una flor sin robarle su aroma, pero sobre todo la capacidad de entrar en uno mismo y ver nuestra realidad...
Momentos maravillosos que vivo en los silencios y soledad de mi mundo de nunca jamás, observo por la rendija de la persiana a las estrellas que brillan cual si fueran la luz de las luciérnagas alumbrando la noche.
Voy reconociendo nuevamente quien soy. Alguna vez he pedido que se pare el mundo por qué inconscientemente he querido bajarme de el. Sonrío y pienso: "Ha sido una gran mentira o tal vez lo he dicho de broma", ahora mismo no tengo intenciones de dejar de ser.
El amor por su vida me permite mantener el corazón abierto lleno de buenos sentimientos capaz de dar y recibir amor. En silencio reconozco el entusiasmo por crecer y aportar lo mejor de mí.
El silencio de un lado y el amor del otro, forman un par de alas para volar… tan alto como yo desee.
En silencio deje de pensar en mis preocupaciones, comprendí que no hay razón para llevar en hombros un equipaje tan pesado, si mi corazón tiene lo que necesita en este viaje maravilloso que se llama vida.
En otros momentos el silencio hubiese sido enloquecedor, pero hoy simplemente lo disfruto.
Soy silencio.
Adolfocanals@educ.ar
Momentos maravillosos que vivo en los silencios y soledad de mi mundo de nunca jamás, observo por la rendija de la persiana a las estrellas que brillan cual si fueran la luz de las luciérnagas alumbrando la noche.
Voy reconociendo nuevamente quien soy. Alguna vez he pedido que se pare el mundo por qué inconscientemente he querido bajarme de el. Sonrío y pienso: "Ha sido una gran mentira o tal vez lo he dicho de broma", ahora mismo no tengo intenciones de dejar de ser.
El amor por su vida me permite mantener el corazón abierto lleno de buenos sentimientos capaz de dar y recibir amor. En silencio reconozco el entusiasmo por crecer y aportar lo mejor de mí.
El silencio de un lado y el amor del otro, forman un par de alas para volar… tan alto como yo desee.
En silencio deje de pensar en mis preocupaciones, comprendí que no hay razón para llevar en hombros un equipaje tan pesado, si mi corazón tiene lo que necesita en este viaje maravilloso que se llama vida.
En otros momentos el silencio hubiese sido enloquecedor, pero hoy simplemente lo disfruto.
Soy silencio.
Adolfocanals@educ.ar
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