Fue una guerra dispuesta de otro modo,
bombas de chocolate y blindados de menta.
Los soldados vestían casaca de barquillo,
casco de mazapán.
Sus fusiles ametrallaban
caramelo y calaban bayonetas de crema o de merengue.
caramelo y calaban bayonetas de crema o de merengue.
Me vi envuelto en la dulce refriega.
Fuí alcanzado por un arroz con leche que se alojó en mi estómago.
Había perdido muchos flanes de huevo.
La transfusión de natillas no llegó a tiempo.
Una hiperglucemia acabó con el sueño
de los pasteles rusos.
Lo amargo estaba perdido.
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