Hoy día seguimos teniendo una gran dificultad en aceptar que los acontecimientos que ocurren en nuestra vida son fenómenos cuánticos.
Nosotros todavía tendemos a percibir el mundo operando bajo los efectos de
la ciencia empírica basada en la ciencia del siglo XVII, con las causas y efectos de Newton, la física mecánica y la división cartesiana del cuerpo y la mente.
Es decir la física clásica.
A principio del siglo XX, el físico Max Planck escribió una fórmula
en una tarjeta que envió a un amigo.
E introdujo al mundo la noción de diminutos, paquetes discretos de energía, que se comportan como ondas y como partículas y se conoce como quanta. Esta formula, E= h X f, ha sido la base de la física cuántica, esa parte de la ciencia que nos dice que la realidad es discontinua y profundamente paradójica –una realidad que no sigue la causa y efecto de la ciencia empírica ordinaria.
Analizando los progresos desde que Planck creó su formula el físico teórico, Amit Goswami ha resumido la naturaleza extraña de la realidad cuántica.
1. Un objeto cuántico (por ejemplo un electrón) puede estar en más de dos sitios al mismo tiempo.
2. Un objeto cuántico no puede ser manifestado en el espacio-tiempo ordinario hasta que se le OBSERVA como partícula.
3. Un objeto cuántico cesa de existir y simultáneamente aparece en existencia en otro lugar; el túnel cuántico.
4. Una manifestación de un objeto cuántico, causado por la observación, simultáneamente influencia a su gemelo cuántico, no importa lo lejos que se encuentren distanciados porque la cuántica opera en el espacio NO LOCAL.
Debemos de empezar a abrazar lo que sabemos da la realidad del mundo a través de la física cuántica, la cosmología, la neurociencia y la evolución de la conciencia porque la aplicación de los principios de la física cuántica han llevado al hombre a la alta tecnología; el descubrimiento del láser, los transistores y los CAT Scan y sobre todo a una mayor integración de uno mismo.
Pero todavía nos cuesta mucho descubrir y trasladar nuestros pensamientos de los procesos de la materia “subatómica” a nuestro lenguaje cotidiano.
A continuación proporcionamos algunas frases que te ayudarán a despertar
tu condición cuántica: Donde la atención va, la energía fluye”
Estamos condicionados para creer que el mundo exterior es más real que el mundo interior y este nuevo modelo de ciencia dice justo lo contrario:
afirma que lo que nos pasa adentro crea justo los acontecimientos externos.
Tenemos el cerebro conectado de tal forma que solo
vemos lo que creemos que es posible.
Combinamos patrones que ya existen en nosotros mediante
el condicionamiento.
El materialismo moderno priva a la gente de la necesidad de sentirse responsable y la religión hace lo mismo.
Pero si tomamos la mecánica cuántica en serio, uno no puede rehuir
de la responsabilidad.
Lo material no es lo que durante mucho tiempo hemos creído que era.
Lo que forman las cosas, no son otras cosas.
Lo que forman las cosas son ideas, conceptos, el pensamiento y la información.
La física cuántica solo calcula posibilidades pero si aceptamos esto surge una pregunta inevitable: ¿quién o qué escoge entre posibilidades para que se produzca el propio acontecimiento de la experiencia? SOLO TÚ.
El mundo son posibles líneas del tiempo, hasta que escogemos.
¿Existen todas las realidades del campo cuántico simultáneamente?
Está el mundo macroscópico, el mundo de nuestras células, el de nuestros átomos, y el de nuestras partículas cuánticas. Y todos ellos son mundos totalmente distintos pero se complementan porque yo soy mis átomos, pero también mis células y también mi fisiología macroscópica.
Todo lo que pensamos es energía dirigida a algún sitio.
¿Sabes realmente lo que estás pesando subconscientemente
conforme va pasando tu día a día?
CREAMOS TODO LO QUE SOMOS, TODO LO QUE EXPERIMENTAMOS
Y TODO LO QUE EXISTE EN NUESTRA VIDA.
Así que la próxima vez que te encuentres quejándote de la guerra,
la economía, los políticos o los impuestos ten la seguridad que tú estás contribuyendo al resultado final de todas estas cuestiones porque...
LO QUE SE RESISTE, PERSISTE.