sábado, 1 de septiembre de 2012

Hay días...(20468)


Hay días en los que se guardan las llaves oxidadas en la garganta donde las arañas tejen silencios sin destino.
Días en los que la lava se derrama por los mercados de flores 
y los embarcaderos solitarios.
Hay días en los que la rutina engulle las mejores intenciones y el incesante bullicio del pensamiento nos aleja de quienes somos 
para vestirnos con los sueños de otros.
Días que cosen las pupilas enrojecidas de quienes detestan el mundo 
de sainete y cascabel donde se construyen muros infranqueables 
con grafitis invisibles a los poderosos.
Hay horas, minutos y segundos de días con heridas de perro y tibias angustias de pájaro que se cuelan en las copas vacías y las fronteras de las camas cueva.
Y entre todos esos días, como una ráfaga de viento inesperada, inventamos
 el remanso de alguna noche fugaz que nos traiga escamas nuevas para 
los pies cansados; alguna noche oscura con alma que ponga un nenúfar 
en nuestra boca sellada, algún sueño sin tiempo ni espera que nos ayude 
a cruzar de nuevo las aceras 
...vendrá mañana.