jueves, 28 de noviembre de 2013

aquella Confesión... (32015)


Hoy me habían citado para la rueda de reconocimiento.
 Llego pronto a las dependencias policiales. 
Aún nervioso, me sitúan delante del cristal. 
Detrás, los ocho sospechosos me miran sin verme. 
Yo les observo secretamente, me acerco y estudio a mis culpables habituales,
 sus gestos, sus pecados grabados en sus rostros; mis padres, mi tutor de escuela, mi confesor, mi vecina la Sra. Socciettá y mi buen amigo Roberto
Hasta Ella, mi ex está allí para recordarme con su mirada roja con sabor a hierro, porqué había venido.

 Y al recordarlo, sin vacilar un instante me identifico.