El telescopio Sunrise observa un movimiento «espectacular» en regiones de la superficie solar que se consideraban en calma
El telescopio espacial Sunrise ha detectado una actividad intensa e inesperada en regiones solares que antes se consideraban en calma.
Chorros supersónicos
IMaX/Sunrise también ha permitido obtener pruebas directas de la existencia de tubos de flujo magnético, considerados los ladrillos del magnetismo solar desde los años 70, pero cuya existencia había sido imposible de demostrar de forma directa debido a su pequeño tamaño.
Otro de los hallazgos se relaciona con la granulación solar, fenómeno producido por el gas caliente que sube hacia la superficie desde el interior solar (seria algo similar al burbujeo del agua al hervir) y que se manifiesta en forma de gránulos con un tamaño medio de aproximadamente 1000 kilómetros y una duración de cinco minutos.
“Además, el telescopio ha permitido detectar chorros magnéticos supersónicos, que liberan gran cantidad de energía, y numerosos vórtices.
En definitiva, Sunrise ofrece una panorámica del Sol inédita y caracterizada por una actividad constante a pequeña y gran escala”