Eva era mi norte, mi musa, ahora en cambio, es un ave que surca mis nostalgias.
Amábala tanto que el atlas me quedó pequeño de tanto seguirla, y esto no es una metáfora: desde Salta, hasta Alabama y Roma, su amor me fue llevando de aquí para allá, hasta que me di cuenta de que amar tiene la fragilidad de una rama que se quiebra fácilmente con el tiempo y la distancia.
Yo sé que acude, perpetuo, mi recuerdo, pero también sé que educa mis sentimientos en el rumbo de la vida.
Hoy soy como un toro que ataca el paño rojo, fuerte e impulsivo,
pero con el corazón que acata su destino.
Palabras bifrontes: palabras que se convierten en otras palabras, al ser leídas al revés.
Ej. acude-educa.
lanavedelg