A principios de marzo compartíamos con ustedes un video explicando los 3 posibles finales sugeridos para nuestro universo (https://www.youtube.com/watch?v=4_aOIA-vyBo), el Big Rip (o Gran Desgarramiento), el Big Freeze (o Gran Congelamiento) y el Big Crunch (o Gran Contracción).
En ese momento habíamos aclarado que las evidencias soportaban al Big Freeze como el final más probable. Sin embargo, trabajos publicados recientemente sugieren que el Big Crunch, o el final en el cual el universo colapsa sobre sí mismo, parece ser posible.
¿Cómo pasamos de una expansión infinita y terminar en una heladera cósmica, a la gran contracción, y terminar en un universo tan caliente y denso como cuando empezó?
En una serie de trabajos publicados en Physical Review Letters, los físicos Nemanja Kaloper y Antonio Padilla proponen un mecanismo para un colapso cosmológico y analizan sus implicancias, las cuales incluyen una explicación para la energía oscura.
"El hecho de que estemos viendo la energía oscura ahora puede tomarse como un indicativo de que el final está próximo.
Los datos con los que contamos sugieren que el colapso comenzaría en unas decenas de miles de millones de años, pero todavía hay que verificar esto apropiadamente."
Una de las principales razones por las que se creía que el final podría ser el Big Freeze era que vivimos en una época dominada por energía oscura en la cual el universo se expande aceleradamente.
Sin embargo, en este trabajo se propone un nuevo mecanismo.
El universo se originó bajo una serie específica de condiciones iniciales que naturalmente evolucionaron al estado actual de aceleración y continuará por ese camino hacia el colapso.
En ese escenario, cuando el colapso se dispara lo hace en un periodo de expansión acelerada como el que vemos hoy.
Eventualmente, el universo detendrá su expansión y comenzará a contraerse, culminando en el Big Crunch.
Los científicos que están detrás de esta idea reconocen que todavía hay mucho para hacer con respecto al desarrollo de su hipótesis y para procurar maneras de poner a prueba sus predicciones
. Sin embargo, es la primera vez que un desarrollo matemático para el universo contempla a la expansión acelerada como un indicador de un posible universo colapsante.
Por lo tanto, habrá que esperar para saber si vale la pena acaparar la compra de ropa invernal o si con una remerita nos alcanza.
