domingo, 5 de abril de 2015

Tablas... Tablas.... Tablas...


Cuando llegué al centro del laberinto, el Minotauro me esperaba parado, 
junto al tablero de ajedrez.
Me invitó a tomar asiento y me preguntó...
Blancas o Negras...?
Me comentó, que si yo ganaba la partida me dejaría ir, 
de lo contrario, ya sabía las consecuencias.
Asentí con la cabeza e inicié la partida... 
Peón 4 Rey, en Minotauro respondió con Peón 3 Dama...

Al cabo de varias horas, acordamos tablas y continuar mañana...
Desde entonces las partidas se han hecho interminables, y quedó en claro que quiero ganarle al Minotauro, como tan claro que nunca su intención fue dejarme ganar