martes, 13 de octubre de 2015

Cumbre... Apenas penas


Vencer el desafío de la cumbre
y sitiar el alcázar de tu vientre
donde fulge la luna que te habita 
desde el alba primera de los tiempos.
Febril cuerpo celeste
que orbita en el vacío de tus piernas,
igual que una galaxia fabulosa
ardida en el cenit del universo.
Confín inalcanzable,
marítimo canal de aguas profundas
donde naufraga el lirio temerario;
alhajero bellísimo que vierte
su diluvio de lágrimas espesas
en la orilla nocturna mi boca.

Del libro Oceanario.