¡¡¡ UFFFF !!!

 Hoy me llega un informe científico que dice: 

La cuarta parte de las especies del planeta ha desaparecido en

 35 años

Claro casi salgo corriendo a la calle gritando que el Fin del Mundo se aproxima.

 Menos mal que ha reinado la calma y he buscado más información primero.

Y claro rápidamente he hecho unos cuantos cálculos: las estimas habituales sitúan el número de especies del planeta en 14 millones aproximadamente. 

De esos 14 millones desconocemos el 87,2%. Si eliminamos de la lista a plantas y cordados, de los cuales conocemos cerca del 90% de especies existentes muy por encima del resto de grupos, el porcentaje total de especies desconocidas sube a 89,2%. Vamos que cualquier estadista haría un pequeño redondeo y diría que aún están por descubrir el 90% de especies existentes.

Yo rápidamente he dividido 14 millones entre 4 y resulta que en 35 años se han extinguido nada menos que 3,5 millones de especies… para cortarse las venas. 

Dentro de 100 años no queda ni una hormiga…

Menos mal que se me han ocurrido explicaciones más alentadoras: igual se refiere sólo a los animales, o incluso sólo a los mamíferos. 

O se refiere a las especies conocidas, que no llegan a 2 millones. 

Así que me he metido rápidamente en la fuente de la información, y  todo ha sido aclarado:

 lo que ha caído en una cuarta parte es un índice de biodiversidad, 

 que no tiene nada que ver con el número de especies.

Biodiversidad (neologismo del inglés Biodiversity, a su vez del griego βιο-, vida, y del latín diversĭtas, -ātis, variedad), también llamada diversidad biológica, es el término¹ por el que se hace referencia a la amplia variedad de seres vivos sobre la Tierra y los patrones naturales que la conforman, resultado de miles de millones de años de Evolución según procesos naturales y también, de la influencia creciente de las actividades del ser humano. La biodiversidad comprende igualmente la variedad de ecosistemas y las diferencias genéticas dentro de cada especie que permiten la combinación de múltiples formas de vida, y cuyas mutuas interacciones y con el resto del entorno, fundamentan el sustento de la vida sobre el planeta.

De modo que el panorama no es tan desalentador:

 con suerte aún estaremos a tiempo. 

Pero que susto me han dado…