lunes, 1 de diciembre de 2014

Línea de Tiempo del Futuro Lejano

Apuntar telescopios hacia los cielos no es solo una práctica arbitraria usada para estudiar el Universo que nos rodea. Es mucho más que eso. 
No solo nos permite estudiar las leyes de la
física que mantienen a la Tierra en órbita alrededor del Sol (lo que en última instancia ha permitido la formación de organismos multicelulares), sino que también funciona como una suerte de máquina del tiempo, permitiéndonos observar algunos de los primeros objetos celestes, creados cuando el Universo era joven.

Nos brinda además la posibilidad de determinar la velocidad a la que se expande el Universo, ver estrellas nacer y morir en igual proporción, detectar cambios en la atmósfera de exoplanetas distantes y tantas cosas más que es difícil decidir cuáles son más importantes.
Sin embargo, se afirma que, debido a la acelerada expansión del Universo, el cielo que hoy observamos se verá radicalmente diferente en unos miles de millones de años.

Suponiendo que el Universo exista tal cual es ahora, sin que hayan tenido lugar el Big Rip, el Big Bounce, Big Slurp o cualquier otro de los escenarios propuestos para el fin del Universo, ¿qué verán nuestros descendientes cuando observen las distantes fuentes de luz?
O mejor dicho, ¿qué no verán? ¿Cómo cambiará el Universo?

En el siguiente gráfico podemos observar qué le espera a nuestro Universo

Foto: Línea de Tiempo del Futuro Lejano 

Apuntar telescopios hacia los cielos no es solo una práctica arbitraria usada para estudiar el Universo que nos rodea. Es mucho más que eso. 
No solo nos permite estudiar las leyes de la
 física que mantienen a la Tierra en órbita alrededor del Sol (lo que en última instancia ha permitido la formación de organismos multicelulares), sino que también funciona como una suerte de máquina del tiempo, permitiéndonos observar algunos de los primeros objetos celestes, creados cuando el Universo era joven.

Nos brinda además la posibilidad de determinar la velocidad a la que se expande el Universo, ver estrellas nacer y morir en igual proporción, detectar cambios en la atmósfera de exoplanetas distantes y tantas cosas más que es difícil decidir cuáles son más importantes.
 Sin embargo, se afirma que, debido a la acelerada expansión del Universo, el cielo que hoy observamos se verá radicalmente diferente en unos miles de millones de años.

Suponiendo que el Universo exista tal cual es ahora, sin que hayan tenido lugar el Big Rip, el Big Bounce, Big Slurp o cualquier otro de los escenarios propuestos para el fin del Universo, ¿qué verán nuestros descendientes cuando observen las distantes fuentes de luz? 
O mejor dicho, ¿qué no verán? ¿Cómo cambiará el Universo?

 En el siguiente gráfico podemos observar qué le espera a nuestro Universo